Como expresión, colocar Blanco sobre Negro, significa que todo se tornará más entendible, se sabrá donde comienza y dónde termina cada cosa. En decoración sucede exactamente lo mismo, quedando las formas bien definidas.
Blanco sobre Negro, son dos «no-colores» que mantienen una perfecta sintonía, contrayéndose el negro, expandiéndose el blanco. Asímismo, el negro se vacía para dejar que el espacio se llene de blanco.