El hogar es el lugar al que regresar así como el punto de partida para iniciar la aventura de vivir. El hogar alberga recuerdos, personas, sueños y pertenencias. Sin embargo, también es un reflejo de nuestros deseos incumplidos, de nuestras necesidades no satisfechas.
En definitiva, el hogar, al ser una prolongación de nosotros mismos, nos sirve como espejo ofreciéndonos la oportunidad de reflexionar, cambiar, crecer.